PROVINCIA Y MUNICIPIO
La Municipalidad intensificó las acciones para luchar contra la enfermedad. Se fortalecen las tareas en los barrios Celia y Villa García. Este lunes se realizó un trabajo de captación de febriles en el San Marcos.
La Municipalidad, junto con el Gobierno provincial, continúa realizando operativos integrales en distintos barrios de la ciudad, a fin de prevenir el brote del dengue, marco en el cual durante los últimos días se intensificaron las medidas.
Las tareas sanitarias, de prevención y limpieza para frenar el contagio las realizan agentes del Ministerio de Salud Pública de la Provincia y de la Municipalidad de Corrientes. Se espera que en 15 o 20 días la propagación disminuya su intensidad.
FOCOS EN LA CIUDAD
El titular de la Subsecretaría de Salud de la Municipalidad explicó que si bien las acciones se llevan a cabo en distintos puntos del territorio citadino, el foco principal está puesto en los barrios Celia y Villa García.
En el marco del fortalecimiento de trabajos preventivos, este martes se realizará un operativo de descacharrado en el sector delimitado por la avenida Independencia, Juan José Castelli, Suiza, Catuegno y Pasaje Londres (barrio Celia).
CONSOLIDACIÓN DE UN EQUIPO
“Desde la Subsecretaría de Salud trabajamos en la consolidación de un equipo en coordinación con el Ministerio de Salud Pública. Tenemos un aumento en la cantidad de casos de dengue, teniendo en cuenta los cambios climáticos que tuvimos en los últimos tiempos”, expresó el subsecretario del área, Arturo Sandoval.
“Está armado un grupo de trabajo con roles concretos con relación a las acciones que cada uno cumple en esta lucha. Lo que hacemos es una línea operativa y estratégica: una vez que la Provincia detecta un caso positivo, nos trasladamos al lugar, se toman muestras de un caso determinado, se confirma y, si da positivo (con análisis del Laboratorio Central de la Provincia), desencadenamos las acciones operativas en terreno”, precisó Sandoval.
El funcionario agregó que, dando continuidad al protocolo operativo, se visita el lugar, tras lo cual se da aviso a la Dirección de Zoonosis, para realizar el bloqueo vectorial correspondiente. En ese sentido, añadió que en aquellos casos en que sean varias las hectáreas a intervenir, “se comunica a la Provincia, porque ante un caso positivo, por protocolo, se debe bloquear un espacio de 9 manzanas”, agregó.
BLOQUEO VECTORIAL Y CAPTACIÓN DE FEBRILES
Una vez realizado el bloqueo vectorial, los agentes sanitarios delimitan la zona y se ejecuta la denominada captación de febriles: un recorrido casa por casa, donde se ingresa y se pregunta a cada persona si padece de fiebre o de algún otro síntoma clínico.
“En consecuencia, en caso de detectarse alguna persona con algún síntoma específico, se toman muestras de sangre para ser enviadas al Laboratorio Central. A su vez, de dar positivo, se hace la contrarreferencia en el terreno, entre la Provincia y el municipio”, explicó Sandoval.
“En la continuidad de las acciones, en las próximas 48 horas se hace el descacharrado posterior junto con el área de Ambiente de la Municipalidad, con un trabajo específico destinado a la parte epidemiológica”, adujo el subsecretario de Salud.
El funcionario municipal subrayó que el balance de los trabajos “es muy positivo” ya que, según señaló, “hemos consolidado la definición de los roles en cuanto a acciones y el trabajo con la Provincia”, aseguró.
DENGUE
El dengue es una enfermedad es transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona infectada con dengue y luego pica a otras personas, les transmite esta enfermedad. El contagio solo se produce por la picadura de los mosquitos infectados; nunca de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna.
Por eso, se recuerda que la mejor forma de prevenir el dengue es eliminar todos los criaderos de mosquitos. Muchos de los recipientes donde el insecto se cría no son de utilidad, como las latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico y lona, y bidones cortados, recipientes que deben ser descartados.
Si los recipientes no pueden eliminarse porque se usan permanentemente en el hogar, debe evitarse que acumulen agua, dándolos vuelta (baldes, palanganas, tambores) o vaciándolos permanentemente (portamacetas, bebederos).